Son procesos periódicos y sistemáticos destinados para asegurar el correcto funcionamiento, seguridad y durabilidad de los vehículos de transporte de carga. Estos mantenimientos incluyen una serie de tareas como inspecciones, ajustes, reparaciones y reemplazos de componentes mecánicos, eléctricos y de seguridad. Se realizan con el fin de prevenir averías, detectar y corregir problemas antes de que se conviertan en fallas mayores, y garantizar que el camión cumpla con los estándares de rendimiento y seguridad establecidos.